Conoce las diferencia entre un Consultor y un Implementador SAP
Cuando se trata de implementar un sistema empresarial tan complejo como SAP, es importante tener una comprensión clara de las diferencias entre los roles de un Consultor y un Implementador. Aunque estos dos roles pueden parecer similares y confundirse en muchos aspectos, son diferentes en cuanto a sus responsabilidades, objetivos y enfoque de trabajo.
Un consultor SAP es un experto en las áreas funcionales de SAP y tiene un amplio conocimiento de las mejores prácticas empresariales. Trabajando estrechamente con el cliente, el consultor asesora sobre cómo SAP puede mejorar los resultados de la empresa y cómo adaptar la solución para lograrlo. También es responsable de diseñar soluciones y definir los procesos empresariales que encaminarán el sistema hacia esos objetivos.
Por otro lado, el implementador SAP es un experto técnico que se asegura de que el software se instale y configure correctamente de acuerdo con los requisitos del cliente y de acuerdo a las prácticas establecidas por el fabricante del sistema. También, se encarga de la integración de la plataforma con los otros sistemas del cliente, que este haya acordado que serían parte de la configuración, tales como otras aplicaciones y softwares complementarios, donde realizará pruebas exhaustivas para garantizar que todo funcione sin problemas.
Es importante destacar que los consultores SAP y los implementadores SAP trabajan en estrecha colaboración. El primero proporciona una visión general de los procesos empresariales y ayuda a definir los requisitos del cliente, mientras que el segundo, el implementador, se asegura de que la solución técnicamente cumpla con estándares de un software de alta calidad y que todos los usuarios comiencen a utilizarlo sin inconvenientes.
En algunos casos, una sola persona puede desempeñar ambos roles. Sin embargo, en proyectos grandes suelen ser desempeñados por diferentes personas o equipos, debido a la amplitud de conocimientos y especialización que requieren. A grandes rasgos, el consultor SAP se centra en las necesidades empresariales y la la adaptación del software a estas, mientras que el implementador SAP se enfoca en la configuración e implementación técnica del software. Ambos roles son críticos para el éxito de un proyecto SAP y trabajan juntos para garantizar una implementación exitosa.
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